miércoles, 20 de julio de 2011

¡Oh, un ataque! No me lo puedo creer.


Indudablemente, Bjarne Riis conoce muy bien a los hermanos Schleck. No en vano fue su director técnico durante todos estos años. Hoy, como rivales, algo sabrá de ellos que lo llevó a plantear un ataque, sí, un ataque, el primer ataque del tour, en un puerto de segunda. Y lo mejor, en ese puerto de segunda, Contador siguió sus órdenes y los dejó de rueda, con gran beneficio para quien, día tras día se va transformando, cada vez más, en el principal candidato a ganar este Tour: Cadel Evans.

La etapa se hizo a una velocidad demencial (45 Km/h) para el terreno (con franca tendencia hacia arriba) y para la climatología (lluvia y frío). La escapada buena no llegó a formarse sino hasta que ya habían pasado los 100 km de etapa, algo bastante extraño, y estuvo integrada por muchos hombres de calidad. Entre ellos los dos noruegos del Tour, Hushovd y Boasson-Hagen, ambos ganadores de etapa este año, que acabaron disputándose una victoria que recayó en el mayor (en gran parte gracias al trabajo de su compañero de equipo Ryder Hesjedal).

Yo confieso que me estaba quedando plácidamente dormido en mi sillón cuando escuché que atacaba Contador. Su primer ataque fue neutralizado, pero entonces, su escudero Dani Navarro impuso un ritmo más fuerte que endureció la carrera propiciando el segundo ataque del madrileño, que esta vez prospero. Sólo pudieron seguir su rueda Samuel Sánchez, que si las cosas siguen así podría plantearse conseguir un podio (pero no creo que las cosas sigan así), y Cadel Evans. En el descenso Evans abrió tres o cuatro segundos, lo que viene a demostrar lo fuerte que está el australiano.

Hoy empiezan los alpes con otra etapa trampa, subiendo Sestrieres a la mitad para terminar, justo antes de meta, en un puerto de segunda (como ayer). La verdad es que un tour que estaba resultando bastante aburrido, parece que empieza a ponerse bueno. ¿Habrá estado fingiendo debilidad Contador hasta ahora? ¿Irá tan mal Andy como se lo vio ayer? ¿Habrá sido sólo un mal día? ¿Podrá Evans aguantar un ataque serio de Contador en un puerto de más de dos o tres quilómetros? Son preguntas que nos invitan a mantenernos despiertos en las etapas que vienen. Queremos más ataques.

No hay comentarios: