En un tour que, después de los Alpes, se mira de otra manera, un tour que fue mucho mejor de lo que yo esperaba, un tour con alternativas, con ataques históricos, con grandes protagonistas que no se escondieron, por fin se le dio a Cadel Evans. Hizo una gran labor en la crono y no le pesó el papel de protagonista (como había pasado en otras oprtunidades). Por la manera en que se defendió el día de Galibier (tras el ataque de Andy) o en el Alpe d'Huez (tras el ataque de Contador), es el merecido ganador y en eso, parecen estar todos de acuerdo.
Fueron 85 horas, 45 minutos y 20 segundos sobre la bicicleta, pero fueron años esperando, casi llegando al objetivo pero sin alcanzarlo, quedándose en la puerta, también es un premio a la constancia. Hoy es el ciclista más viejo en obtener su primer Tour, el primero del hemisferio sur en lograrlo, a una edad (34 para 35) a la que la mayoría piensan en el retiro si no es que ya se han retirado. Y cuidado, el BMC se está reforzando para la próxima temporada (Gilbert ya está adentro), con lo sólido que se vio a Evans este año, podría lograrlo de nuevo. Sólo esperemos no enterarnos dentro de un par de meses que se estaba alimentando con solomillo de Irún.
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