me gusta el mito, que, como todos, tiene buena parte de falsedad, de montevideo como ciudad detenida en el tiempo, lo he visto en varios medios de comunicación internacionales, desde periódicos hasta revistas para viajeros. podríamos pensar que ha sido construido con esmero desde mediados del siglo pasado, cuando el país empezó a caer en picada desde su pedestal suizo hacia su realidad latinoamericana de militares, deuda externa y hambre. sin embargo, recuerdo un poema de borges titulado, precisamente, "montevideo", aparecido en 1925 en "luna de enfrente":
"Eres el Buenos Aires que tuvimos, el que en los años se alejó quietamente."(1)
entonces, ¿ya desde principios del siglo XX, cerca del centenario, cuando la ciudad florecía con nuevas construcciones, era considerada pasado apacible, idilio pastoril? a mí me parece que borges, como tantas veces, da la clave de este mito: montevideo tenía que diferenciarse de su hermana mayor. de su hermana presumida de la otra orilla, siempre esforzándose por estar en la cresta de la ola. el "uruguayo humilde", la manida medianía, la ciudad que es pasado, tranquilidad pueblerina, son mitologías que responden a un posicionamiento que hiciera posible la existencia de este "otro" puerto, el pariente pobre, el perdedor. sí: ustedes son el anverso, pues nostros seremos el reverso.
puede ser cierto que los montevideanos son "tranquilos", sin embargo, en una ciudad tan grande como méxico, la gente es mucho más relajada que los montevideanos, o por lo menos a mí me lo pareció. lo que no admite dudas es que, claramente, los montevideanos no son esos oficinistas cincuenteros que toman café en una novela de benedetti, montevideo no es santa maría y díaz grey no vive en el barrio sur. ¿por qué elegimos la mitopoética onettiana antes que la levreriana (mucho más lúdica) o la masliahna, por decir otros nombres? porque nos conviene, porque nos hace diferentes y atractivos.
yo creo, como decía antes, que está bien. me gusta. me parece una buena imagen de marca, una buena estrategia de producto para vender como alternativa, o complemento más bien, al turista desprevenido que viene a escuchar tangos a buenos aires: "amigo, cruzando este río de chocolate está el pasado, no se lo pierda."
ahora, eso sí, hay que ser conscientes de que la realidad es otra. el tiempo no se detiene en ninguna parte y montevideo no es tristán narvaja ni la feria de los sábados en la plaza matriz, como buenos aires no es san telmo y méxico no es la lagunilla ni madrid es el rastro.
(1)- el final es muy bueno: "Ciudad que se oye como un verso/Calles con luz de patio."
martes, 28 de julio de 2009
mitologías
publicado hoy en el pais de madrid
por juan cruz.
La capital de Uruguay es una ciudad sin tiempo, un escenario de la mente. Por eso provoca tanta literatura y por eso La Maga, el personaje de 'Rayuela', estaba convencida de que la orilla de su río estaba poblada de inmensos reptiles.
Amí me suena raro el Uruguay. Montevideo debe estar lleno de torres, de campanas fundidas después de las batallas. No me diga que en Montevideo no hay grandísimos lagartos a la orilla del río.
-Por supuesto -dijo La Maga-. Son cosas que se visitan tomando el ómnibus que va a Pocitos".
Ése es un diálogo de Rayuela. Suponía Horacio Oliveira que La Maga era de Montevideo, y en esa conversación Gregorovius se interesa ante ella por la capital del paisito. Ella desliza el nombre de esa playa, Pocitos, adonde le gustaba ir a Onetti a mostrar las canillas pálidas que en Madrid le mordía su perra, la Biche.
No es la única referencia a Montevideo que Julio Cortázar hace en Rayuela. Vayan con esa descripción de La Maga a la Ciudad Vieja o a La Rambla, 22 kilómetros de costa donde los enamorados esperan, como los pescadores, a que el sol baje y se haga de sangre: "En Montevideo no había tiempo, entonces. Vivíamos muy cerca del río, en una casa grandísima con un patio. Yo tenía siempre trece años, me acuerdo tan bien...".
En un parrafito Cortázar atrae la sensación que a uno se le pega en Montevideo: parece que el tiempo se paró. Hay un mercado, La Feria de Tristán Narvaja. Ahí es donde se entendería mejor esa permanencia del tiempo a la que alude La Maga. Como si de pronto Montevideo hubiera confundido el pasado con el presente, y los objetos tomaran vida para convertirse en metáfora de la capital del paisito. Se celebra el domingo, el día sin tiempo, y ahí se mezclan frutas y verduras con libros viejos, discos de pasta, pajareras, muebles antiguos y todo lo que la imaginación inventa; aviones viejos, por ejemplo.
Es una ciudad en la que lo que se vende es bueno. Así que si uno se va por el lado de los libros, ahí está el boom como si acabara de salir, y las ediciones de Onetti (el rey del año, es su centenario), o de Mario Benedetti e Idea Vilariño, los poetas que murieron esta primavera, habría que llevar el bolsillo dispuesto. Un amigo montevideano decía: "Esa cuadra [manzana, en España] entera de libros usados es la perdición".
La ciudad sin tiempo. Los cafés de Montevideo, desde ese fabuloso, y modesto, Café Brasilero, en la calle Ituizangó, donde escribe Eduardo Galeano cada tarde y donde a veces canta Daniel Viglietti, inicia una retahíla de locales en los que, en efecto, La Maga podría estar hoy aún con sus 13 años. Un día entré en uno de esos cafés, polvorientos como las carreteras de Santa María, la invención de Onetti, y el hombre que limpiaba las tazas dijo, sin levantar la vista del fregadero:
-Está cerrado.
-¿Desde cuándo?, preguntamos.
-Desde hace un siglo.
Cerrado, quizá, detenido también, pero vivo. Si uno va a La Rambla, ese lugar de enamorados y pescadores, encontrará a la gente esperando la puesta de sol como si estuvieran convocados por un rito: hay una novela, El corredor nocturno, de Hugo Burel (será película, dirigida por Gerardo Herrero) que describe La Rambla como un escenario de la mente. Y es que Montevideo es un escenario de la mente. Por eso provoca tanta literatura.
Si uno quiere tocar los libros como si tuvieran un siglo pero acabaran de salir, puede ir a Linardi y Risso, a El Galeón, a Oriente Occidente... Pero no sólo. Hay monumentos, teatros, antigüedades, buena carne, verduras recién cosechadas y gente que tiene tiempo para conversar. Está el mercado del puerto, el Teatro Solís, el mercado de la abundancia, donde se escucha tango, y ahora, durante lo que queda de año, el Centro Español de Cultura que dirige Hortensia Campanella ofrece todas las semanas una excursión por el mundo de Onetti... En el ascensor, un acompañante inesperado: el propio Onetti, de tamaño natural. Y es que, como reza el eslogan que ahora domina sobre el Teatro Solís, "Onetti es Montevideo". La instalación es del fotógrafo José Ángel Urruzola, y la foto que contiene fue hecha en los cincuenta por un legendario amigo del escritor, el dibujante Menchi Sábat, habitante que fue también de este sitio donde a La Maga no le extrañaba que hubiera grandísimos lagartos a la orilla del río.
sábado, 25 de julio de 2009
El nuevo dios
Hoy por la tarde, Alberto Contador va a ganar su segundo Tour de Francia. Cuando, hace dos años, ganó el primero, se veía ya despuntar al ciclista que iba a dominar las grandes vueltas en los próximos años. Después ganó el Giro y la Vuelta a España. Pero es en este Tour que Contador afirma que, en la próxima década, su nombre será el que más se escuche en las crónicas ciclistas del verano boreal.
Ayer, cuando Andy Schleck (que parece que será el Jan Ulrich de los próximos tours), lo atacaba con todo lo que tenía, una y otra vez, y otra vez, y Contador respondía siempre sin demostrar fatiga, con esa danza leve que practica sobre la bicicleta, como si esta fuera de papel y sus piernas el aire, nadie podía dejar de ver al nuevo Dios. Es que venía de ganar el jueves la contrarreloj individual y no hay que ser un genio para darse cuenta de que si alguien es bueno en la contrarreloj, ni siquiera tiene que ser el mejor, y es buen escalador, será muy difícil que pierda en el Tour. Eso era algo que siempre supo el Dios que desciende, Lance Armstrong.
Repasemos el último año de Contador porque da miedo. No pudo correr el Tour 2008 por el eterno tema del dopaje, en este caso por él, sino por su equipo (un tour que, da la impresión, hubiera ganado con facilidad). Pero, como si estuviera enojado, ganó el Giro de Italia en junio, fue a las Olimpíadas en Agosto y se quedó a ocho segundos del bronce en la contrarreloj, y en setiembre ganó la Vuelta a España. Y todo eso con los 25 años que tenía entonces. Hoy, con 26, estará, por segunda vez, en el lugar más alto del podio en París.
"Será una foto histórica" dijo el de madrileño. Todas las fotos en París son históricas, pero es cierto que su primer tour estuvo dentro de esos tres años de nadie, después de la retirada de Lance. Incluso la forma en la que él accedió al maillot jaune en el 2007, con la descalificación de Rassmussen, no es la que un competidor de su talla hubiera deseado. "Cuando uno gana quiere que los que están atrás de él sean buenos y con nombre" agregó con la consciencia que sólo tienen los grandes campeones, los que saben que lo importante no es vencer sino cómo se obtiene la victoria.
"Tuve que ganar dos tours, uno en la ruta y otro en el hotel" dijo ayer, al finalizar la etapa en el mítico Mont Ventoux, sacándose toda la presión de arriba y explicitando lo que todos suponíamos. Pero así tenía que ser, porque así se forjan los héroes del Tour. El domingo pasado en Verbier la llama sagrada del ciclismo cambió de manos cuando Contador atacó y ni Armstrong, ni nadie, pudieron seguirlo. Era la imagen que faltaba, la del retador que derroca al rey.
Ahora, Lance promete que armará su propio equio (Radioshack, al parecer) con Bruyneel y se preparará mejor para el 2010. Ojalá lo haga, ojalá pueda, porque de los que hay ahora, ninguno parece que pueda hacerle sombra a este español que estará, año tras año, protagonizando las crónicas periodísticas deportivas de cada mes de julio.
Ayer, cuando Andy Schleck (que parece que será el Jan Ulrich de los próximos tours), lo atacaba con todo lo que tenía, una y otra vez, y otra vez, y Contador respondía siempre sin demostrar fatiga, con esa danza leve que practica sobre la bicicleta, como si esta fuera de papel y sus piernas el aire, nadie podía dejar de ver al nuevo Dios. Es que venía de ganar el jueves la contrarreloj individual y no hay que ser un genio para darse cuenta de que si alguien es bueno en la contrarreloj, ni siquiera tiene que ser el mejor, y es buen escalador, será muy difícil que pierda en el Tour. Eso era algo que siempre supo el Dios que desciende, Lance Armstrong.
Repasemos el último año de Contador porque da miedo. No pudo correr el Tour 2008 por el eterno tema del dopaje, en este caso por él, sino por su equipo (un tour que, da la impresión, hubiera ganado con facilidad). Pero, como si estuviera enojado, ganó el Giro de Italia en junio, fue a las Olimpíadas en Agosto y se quedó a ocho segundos del bronce en la contrarreloj, y en setiembre ganó la Vuelta a España. Y todo eso con los 25 años que tenía entonces. Hoy, con 26, estará, por segunda vez, en el lugar más alto del podio en París.
"Será una foto histórica" dijo el de madrileño. Todas las fotos en París son históricas, pero es cierto que su primer tour estuvo dentro de esos tres años de nadie, después de la retirada de Lance. Incluso la forma en la que él accedió al maillot jaune en el 2007, con la descalificación de Rassmussen, no es la que un competidor de su talla hubiera deseado. "Cuando uno gana quiere que los que están atrás de él sean buenos y con nombre" agregó con la consciencia que sólo tienen los grandes campeones, los que saben que lo importante no es vencer sino cómo se obtiene la victoria.
"Tuve que ganar dos tours, uno en la ruta y otro en el hotel" dijo ayer, al finalizar la etapa en el mítico Mont Ventoux, sacándose toda la presión de arriba y explicitando lo que todos suponíamos. Pero así tenía que ser, porque así se forjan los héroes del Tour. El domingo pasado en Verbier la llama sagrada del ciclismo cambió de manos cuando Contador atacó y ni Armstrong, ni nadie, pudieron seguirlo. Era la imagen que faltaba, la del retador que derroca al rey.
Ahora, Lance promete que armará su propio equio (Radioshack, al parecer) con Bruyneel y se preparará mejor para el 2010. Ojalá lo haga, ojalá pueda, porque de los que hay ahora, ninguno parece que pueda hacerle sombra a este español que estará, año tras año, protagonizando las crónicas periodísticas deportivas de cada mes de julio.
el sueño del héroe
en esa roca lunar que se corona a los dos mil metros de altura con una especie de faro del parnaso, pelada por el permanente mistral incansable, que en mi recuerdo siempre tendrá a lance armstrong sorprendiendo al pirata pantani para alcanzarlo y después dejarlo ganar, hoy un hombre llegó a la cima de su carrera.
ganar una competencia, cualquiera sea, es algo por lo cual sentir orgullo. ganar a nivel profesional debe ser hermoso. ganar a nivel mundial no se debe poder creer. competir en el tour de francia debe ser mágico. ganar una etapa del tour, bueno, la mayoría de los que lo hacen (exceptuando a los esprinters demasiado acostumbrados) no puede evitar las lágrimas. ahora: GANAR EN EL MONT VENTOUX, eso es convertirse en un héroe.
"ayer soñé que ganaba, soñé que llegaba con alberto (contador) y él me dejaba ganar" dijo Juan Manuel Gárate a los micrófonos de tve después de la etapa, después de una fuga que se prolongó durante casi toda la etapa y que al llegar a los pies del ventoux no tenía más de dos minutos y parecía muerta. sólo él y tony martin (el brillante juvenil) creyeron y sólo él tuvo el premio (ayudado, es cierto, por el férreo marcaje que pusieron los hombres del astana, contador y armstrong, a los del saxobank, frank y andy schleck). a los 33 años, gárate gana por fin una etapa del tour y se convierte en el único hombre en activo en haber conseguido victorias de etapa en las tres grandes vueltas. pero será recordado para siempre por ese día de sueño en el ventoux. todavía no se debe haber despertado.
ganar una competencia, cualquiera sea, es algo por lo cual sentir orgullo. ganar a nivel profesional debe ser hermoso. ganar a nivel mundial no se debe poder creer. competir en el tour de francia debe ser mágico. ganar una etapa del tour, bueno, la mayoría de los que lo hacen (exceptuando a los esprinters demasiado acostumbrados) no puede evitar las lágrimas. ahora: GANAR EN EL MONT VENTOUX, eso es convertirse en un héroe.
"ayer soñé que ganaba, soñé que llegaba con alberto (contador) y él me dejaba ganar" dijo Juan Manuel Gárate a los micrófonos de tve después de la etapa, después de una fuga que se prolongó durante casi toda la etapa y que al llegar a los pies del ventoux no tenía más de dos minutos y parecía muerta. sólo él y tony martin (el brillante juvenil) creyeron y sólo él tuvo el premio (ayudado, es cierto, por el férreo marcaje que pusieron los hombres del astana, contador y armstrong, a los del saxobank, frank y andy schleck). a los 33 años, gárate gana por fin una etapa del tour y se convierte en el único hombre en activo en haber conseguido victorias de etapa en las tres grandes vueltas. pero será recordado para siempre por ese día de sueño en el ventoux. todavía no se debe haber despertado.
miércoles, 22 de julio de 2009
un comentario objetivo sobre el concierto de keith jarret, jack dejohnette y gary peacock que acabo de ver en el auditori
uf!
(me duelen las manos de aplaudir, literalmente)
(me duelen las manos de aplaudir, literalmente)
martes, 21 de julio de 2009
otro regalo de cumpleaños
Al más puro estilo Armstrong
Ayer fue un día muy importante para la historia del Tour de Francia. Un día que, a medida que pase el tiempo, se recordará como el fin de una era y el comienzo de otra. Todos estábamos esperando esta primera jornada y único final en alto de los Alpes. ¿Qué pasaría cuándo alguien atacará de verdad a Armstrong? ¿Podría Contador con el peso de esa responsabilidad? ¿Qué harían los demás? Al comienzo del ascenso, la tensión podía palparse incluso a través del televisor y, finalmente, todas las preguntas fueron respondidas en a penas diez o quince minutos.
Ya en los primeros metros de pendiente, el equipo Saxo Bank hizo lo que nadie había hecho hasta ahora, endurecer las condiciones, robarle el protagonismo al Astana, tratando de fraguar el ataque de Andy Schleck y aprovechando una escapada previa de Cancellara. En el pimer kilómetro, el grupo de los líderes se vio reducido tan solo a los candidatos, con tres Astanas allí: Armstrong, Kloden y Contador. Las pulsaciones se aceleraban, la emoción crecía, las piernas sufrían cada vez más. Y ahí, entonces, en uno de esos momentos que quedarán para siempre en el recuerdo, apareció la historia: Contador se separó un poco, miró al grupo, estudió las caras de todos, sobre todo la de Lance, y al más puro estilo Armstrong, dio la estocada que nadie fue capaz de contestar, cuando todavía quedaban más de cinco quilómetros de subida.
La cara de Armstrong lo decía todo: el hombre que había dominado la competición durante siete años, cuya célebre mirada de asesino todos temían en los Alpes, el héroe del Alpe d’huez, de Hautacam o de Luz-Ardiden, el de la épica escalada al Mont Ventoux junto a Pantani, el hombre al que las piernas siempre habían respondido, no encontraba las fuerzas y sufría. Ordenó a Kloden que impusiera un ritmo seguro y se puso a rueda, pero el daño ya estaba hecho. Saltó el menor de los Schleck y no pudo seguirlo, saltó Nivali y no pudo seguirlo, saltó el mayor de los Schleck y no pudo seguirlo, pasaron Wiggins, Sastre y Evans y el tejano no respondió.
Cuando Contador llegó a la meta y se vistió de amarillo, fue como si todo el mundo respirase aliviado. Antes que nada Alberto Contador, pero también la prensa, Bruyneel, los demás miembros del Astana, los espectadores y, yo creo, hasta el mismo Armstrong. La duda había sido resuelta y ahora todos podrán hablar de que un hombre de casi 38 años está ahí, segundo en el Tour y llegó con sólo 1:35 de diferencia. Ahora, viendo al hombre en toda su dimensión, viéndolo sufrir como sufren todos, podemos juzgar mejor las hazañas conseguidas.
Cuando Contador ganó su primer Tour en el 2007 Lance no estaba. Faltaba este relevo, faltaba el ataque del joven al viejo. Porque los héroes, pregúntenle a Homero, para ser verdaderamente héroes, también tienen que morir y Verbier será recordado como la tumba de Armstrong. La pregunta ahora es: ¿Cuándo alguien hará lo mismo con Contador?
¡El rey ha muerto, larga vida al rey!
Ya en los primeros metros de pendiente, el equipo Saxo Bank hizo lo que nadie había hecho hasta ahora, endurecer las condiciones, robarle el protagonismo al Astana, tratando de fraguar el ataque de Andy Schleck y aprovechando una escapada previa de Cancellara. En el pimer kilómetro, el grupo de los líderes se vio reducido tan solo a los candidatos, con tres Astanas allí: Armstrong, Kloden y Contador. Las pulsaciones se aceleraban, la emoción crecía, las piernas sufrían cada vez más. Y ahí, entonces, en uno de esos momentos que quedarán para siempre en el recuerdo, apareció la historia: Contador se separó un poco, miró al grupo, estudió las caras de todos, sobre todo la de Lance, y al más puro estilo Armstrong, dio la estocada que nadie fue capaz de contestar, cuando todavía quedaban más de cinco quilómetros de subida.
La cara de Armstrong lo decía todo: el hombre que había dominado la competición durante siete años, cuya célebre mirada de asesino todos temían en los Alpes, el héroe del Alpe d’huez, de Hautacam o de Luz-Ardiden, el de la épica escalada al Mont Ventoux junto a Pantani, el hombre al que las piernas siempre habían respondido, no encontraba las fuerzas y sufría. Ordenó a Kloden que impusiera un ritmo seguro y se puso a rueda, pero el daño ya estaba hecho. Saltó el menor de los Schleck y no pudo seguirlo, saltó Nivali y no pudo seguirlo, saltó el mayor de los Schleck y no pudo seguirlo, pasaron Wiggins, Sastre y Evans y el tejano no respondió.
Cuando Contador llegó a la meta y se vistió de amarillo, fue como si todo el mundo respirase aliviado. Antes que nada Alberto Contador, pero también la prensa, Bruyneel, los demás miembros del Astana, los espectadores y, yo creo, hasta el mismo Armstrong. La duda había sido resuelta y ahora todos podrán hablar de que un hombre de casi 38 años está ahí, segundo en el Tour y llegó con sólo 1:35 de diferencia. Ahora, viendo al hombre en toda su dimensión, viéndolo sufrir como sufren todos, podemos juzgar mejor las hazañas conseguidas.
Cuando Contador ganó su primer Tour en el 2007 Lance no estaba. Faltaba este relevo, faltaba el ataque del joven al viejo. Porque los héroes, pregúntenle a Homero, para ser verdaderamente héroes, también tienen que morir y Verbier será recordado como la tumba de Armstrong. La pregunta ahora es: ¿Cuándo alguien hará lo mismo con Contador?
¡El rey ha muerto, larga vida al rey!
domingo, 19 de julio de 2009
el trigo de la luna 2
dos años cumple este blog. Darnauchans tenía 36 cuando editó “El trigo de la luna”, yo 16. han pasado 20 años ya.
el trigo de la luna:
Y no te vayas a creer que es fácil
Ver en las aristas de la bruma
Las joyas tristes
Las espigas del trigo de la luna.
Son las perlecitas ateridas
Las lágrimas del llanto de Medusa
Desconocida
Las espigas del trigo de la luna.
Sin contorno,
Sin estado,
Invisibles a los ojos apurados,
En los trigales de la luna
Los granos del trigo de la luna
Brillan de un brillar verdeazulado.
Destellan en el lente galileo
Ondeando en el no-viento de la luna
Abandonados
Los diamantes privados de fortuna
Las lágrimas del trigo de la luna.
el trigo de la luna:
Y no te vayas a creer que es fácil
Ver en las aristas de la bruma
Las joyas tristes
Las espigas del trigo de la luna.
Son las perlecitas ateridas
Las lágrimas del llanto de Medusa
Desconocida
Las espigas del trigo de la luna.
Sin contorno,
Sin estado,
Invisibles a los ojos apurados,
En los trigales de la luna
Los granos del trigo de la luna
Brillan de un brillar verdeazulado.
Destellan en el lente galileo
Ondeando en el no-viento de la luna
Abandonados
Los diamantes privados de fortuna
Las lágrimas del trigo de la luna.
sábado, 18 de julio de 2009
para regalarse no hay como uno
regalos que he recibido, de mí mismo, por mi aniversario de mañana (teatralización).
- ¡cuántos libros! te pusiste en gastos, no hacía falta...
- por favor, la ocasión lo amerita.
(APERTURA DE PAQUETE 1: HÖLDERLIN, FRIEDRICH, "POEMAS DE LA LOCURA", POESÍA HIPERIÓN)
- qué bueno, hölderlin...
- y cuando estaba loco.
- ¡muchas gracias!
- humildemente scardanelli.
(APERTURA DE PAQUETE 2: BRODSKY JOSEPH, "NO VENDRÁ EL DILUVIO TRAS NOSOTROS", ANTOLOGÍA POÉTICA 1960-1996, GALAXIA GUTENBERG)
-qué bueno, siempre quise tener un libro de brodsky.
- y esta es una edición al cuidado de nuestro común amigo nicanor vélez.
(APERTURA DE PAQUETE 3: AJMÁTOVA, ANA Y TSVETÁIEVA, MARINA, "EL CANTO Y LA CENIZA", ANTOLOGÍA POÉTICA, GALAXIA GUTENBERG)
- ¡ah pero qué bien, cuánto ruso!
- una vez más, al cuidado de nicanor.
(APERTURA DE PAQUETE 4: RICO, FRANCISCO, "MIL AÑOS DE POESÍA EUROPEA", BACKLIST)
- epa, esto tiene buena pinta. leí una buena crítica en babelia.
- yo también. fijate que todos los poemas están en su mejor traducción al español y en el idioma original.
- muy bien. ¡sos un crack!
(APERTURA DE PAQUETE 5: GOMBROWICZ, WITOLD, "CURSO DE FILOSOFÍA EN SEIS HORAS Y CUARTO", TUSQUETS)
- ah, qué bonito, gombrowicz siempre cae bien.
- sí, este libro parece más bien un timo, pero me dio curiosidad, viste.
- no y a mí también.
(APERTURA DE PAQUETE 6: BOLAÑO, ROBERTO, "NOCTURNO DE CHILE", ANAGRAMA)
- ¡el que me faltaba de bolaño! qué acertado. perfecto para las vacaciones.
- en eso pensé.
(APERTURA DE PAQUETE 7:CARVER, RAYMOND, "SI ME NECESITAS, LLÁMAME", ANAGRAMA)
- ¡el que me faltaba de carver! cómo sabés...
- viste, me fijé en tu biblioteca.
- siempre estuve por comprarlo pero me parecía de esas cosas truchas de revolvedores de cajones de los muertos.
- sí, yo pienso lo mismo, pero también puede estar bien.
- obvio, no deja de ser carver, with a littlle help of tess gallagher.
- as usual.
- otro que es ideal para las vacaciones.
- también lo pensé.
- estás en todo. ¿y este?
(APERTURA DE PAQUETE 8: HERRALDE, JORGE (ed.), "EL MEJOR HUMOR INGLÉS", ANAGRAMA)
- ah, ese es un regalo de jorge herralde que dice que su editorial también cumple, cuarenta años, y te manda esto de regalo (cada vez que comprás 2 libros de él, claro está). parece que estuviera bien, los autores son buenos.
- si lo ves a jorge de vuelta, decile que cuando quiera le puedo dar algún inédito, o dos.
- prefecto, le digo. bueno, ¡feliz cumpleaños!
- ¡muchas gracias!
- usted las merece.
- te pasaste.
- ¡cuántos libros! te pusiste en gastos, no hacía falta...
- por favor, la ocasión lo amerita.
(APERTURA DE PAQUETE 1: HÖLDERLIN, FRIEDRICH, "POEMAS DE LA LOCURA", POESÍA HIPERIÓN)
- qué bueno, hölderlin...
- y cuando estaba loco.
- ¡muchas gracias!
- humildemente scardanelli.
(APERTURA DE PAQUETE 2: BRODSKY JOSEPH, "NO VENDRÁ EL DILUVIO TRAS NOSOTROS", ANTOLOGÍA POÉTICA 1960-1996, GALAXIA GUTENBERG)
-qué bueno, siempre quise tener un libro de brodsky.
- y esta es una edición al cuidado de nuestro común amigo nicanor vélez.
(APERTURA DE PAQUETE 3: AJMÁTOVA, ANA Y TSVETÁIEVA, MARINA, "EL CANTO Y LA CENIZA", ANTOLOGÍA POÉTICA, GALAXIA GUTENBERG)
- ¡ah pero qué bien, cuánto ruso!
- una vez más, al cuidado de nicanor.
(APERTURA DE PAQUETE 4: RICO, FRANCISCO, "MIL AÑOS DE POESÍA EUROPEA", BACKLIST)
- epa, esto tiene buena pinta. leí una buena crítica en babelia.
- yo también. fijate que todos los poemas están en su mejor traducción al español y en el idioma original.
- muy bien. ¡sos un crack!
(APERTURA DE PAQUETE 5: GOMBROWICZ, WITOLD, "CURSO DE FILOSOFÍA EN SEIS HORAS Y CUARTO", TUSQUETS)
- ah, qué bonito, gombrowicz siempre cae bien.
- sí, este libro parece más bien un timo, pero me dio curiosidad, viste.
- no y a mí también.
(APERTURA DE PAQUETE 6: BOLAÑO, ROBERTO, "NOCTURNO DE CHILE", ANAGRAMA)
- ¡el que me faltaba de bolaño! qué acertado. perfecto para las vacaciones.
- en eso pensé.
(APERTURA DE PAQUETE 7:CARVER, RAYMOND, "SI ME NECESITAS, LLÁMAME", ANAGRAMA)
- ¡el que me faltaba de carver! cómo sabés...
- viste, me fijé en tu biblioteca.
- siempre estuve por comprarlo pero me parecía de esas cosas truchas de revolvedores de cajones de los muertos.
- sí, yo pienso lo mismo, pero también puede estar bien.
- obvio, no deja de ser carver, with a littlle help of tess gallagher.
- as usual.
- otro que es ideal para las vacaciones.
- también lo pensé.
- estás en todo. ¿y este?
(APERTURA DE PAQUETE 8: HERRALDE, JORGE (ed.), "EL MEJOR HUMOR INGLÉS", ANAGRAMA)
- ah, ese es un regalo de jorge herralde que dice que su editorial también cumple, cuarenta años, y te manda esto de regalo (cada vez que comprás 2 libros de él, claro está). parece que estuviera bien, los autores son buenos.
- si lo ves a jorge de vuelta, decile que cuando quiera le puedo dar algún inédito, o dos.
- prefecto, le digo. bueno, ¡feliz cumpleaños!
- ¡muchas gracias!
- usted las merece.
- te pasaste.
no news are bad news
a esta altura, parece que lo único interesante que podría pasar en el tour de francia 2009 es que algún ciclista, o varios de ellos, se duerman en plena ruta y provoquen una caída masiva.
cuando entramos en la última y decisiva semana, ya de cara a los alpes: no pasa nada. es el tour más aburrido que me ha tocado ver, y con distancia.
el domingo hay final en puerto de primera categoría; a ver, gritemos todos juntos:
¡evans!
¡sastre!
¡menchov!
¡schleck!
¡hagan algo! por lo menos un intento.
cuando entramos en la última y decisiva semana, ya de cara a los alpes: no pasa nada. es el tour más aburrido que me ha tocado ver, y con distancia.
el domingo hay final en puerto de primera categoría; a ver, gritemos todos juntos:
¡evans!
¡sastre!
¡menchov!
¡schleck!
¡hagan algo! por lo menos un intento.
miércoles, 15 de julio de 2009
triste, nostálgico y pop
el día está gris (¡hace una semana! pregunta: ¿esta no era la península del sol?) y yo estoy como un poeta en un aeropuerto.
Extraño como un pato en el Manzanares,
torpe como un suicida sin vocación,
absurdo como un belga por soleares,
vacío como una isla sin Robinson,
oscuro como un túnel sin tren expreso,
negro como los ángeles de Machín,
febril como la carta de amor de un preso...
así estoy yo, así estoy yo sin ti.
Perdido como un quinto en día de permiso,
como un santo sin paraíso,
como el ojo del maniquí,
huraño como un dandy con lamparones,
como un barco sin polizones...,
así estoy yo sin ti..
Más triste que un torero
al otro lado del telón de acero.
Así estoy yo sin ti.
Vencido como un viejo que pierde al tute,
lascivo como el beso del coronel,
furtivo como el Lute cuando era el Lute,
inquieto como un párroco en un burdel,
errante como un taxi por el desierto,
quemado como el cielo de Chernovil,
solo como un poeta en el aeropuerto...
así estoy yo, así estoy yo, sin ti.
Inútil como un sello por triplicado,
como el semen de los ahorcados,
como el libro del porvenir,
violento como un niño sin cumpleaños,
como el perfume del desengaño...,
así estoy yo sin ti...
Más triste que un torero
al otro lado del telón de acero.
Así estoy yo, así estoy yo sin ti.
Amargo como el vino del exiliado,
como el domingo del jubilado,
como una boda por lo civil,
macabro como el vientre de los misiles,
como un pájaro en un desfile...,
así estoy yo, así estoy yo, sin ti.
Más triste que un torero
al otro lado del telón de acero.
Así estoy yo, así estoy yo sin ti.
digan lo que quieran de sabina, pero antes háganme una lista de comparaciones como esta, y en dodecasílabos (aunque imperfectos); difícil métrica que es la que le otorga esa sensación de grandeza.
así estoy yo sin ti.
Extraño como un pato en el Manzanares,
torpe como un suicida sin vocación,
absurdo como un belga por soleares,
vacío como una isla sin Robinson,
oscuro como un túnel sin tren expreso,
negro como los ángeles de Machín,
febril como la carta de amor de un preso...
así estoy yo, así estoy yo sin ti.
Perdido como un quinto en día de permiso,
como un santo sin paraíso,
como el ojo del maniquí,
huraño como un dandy con lamparones,
como un barco sin polizones...,
así estoy yo sin ti..
Más triste que un torero
al otro lado del telón de acero.
Así estoy yo sin ti.
Vencido como un viejo que pierde al tute,
lascivo como el beso del coronel,
furtivo como el Lute cuando era el Lute,
inquieto como un párroco en un burdel,
errante como un taxi por el desierto,
quemado como el cielo de Chernovil,
solo como un poeta en el aeropuerto...
así estoy yo, así estoy yo, sin ti.
Inútil como un sello por triplicado,
como el semen de los ahorcados,
como el libro del porvenir,
violento como un niño sin cumpleaños,
como el perfume del desengaño...,
así estoy yo sin ti...
Más triste que un torero
al otro lado del telón de acero.
Así estoy yo, así estoy yo sin ti.
Amargo como el vino del exiliado,
como el domingo del jubilado,
como una boda por lo civil,
macabro como el vientre de los misiles,
como un pájaro en un desfile...,
así estoy yo, así estoy yo, sin ti.
Más triste que un torero
al otro lado del telón de acero.
Así estoy yo, así estoy yo sin ti.
digan lo que quieran de sabina, pero antes háganme una lista de comparaciones como esta, y en dodecasílabos (aunque imperfectos); difícil métrica que es la que le otorga esa sensación de grandeza.
así estoy yo sin ti.
martes, 14 de julio de 2009
voy a decir algo, pero que no salga de acá.
este tour que parece diseñado para que lo gane un hombre de 38 años, más o menos, sostenido por un gran equipo, está un tanto aburrido. nadie ataca, no pasa nada, casi no hay finales en alta montaña, todo se neutraliza fácilmente, falta heroísmo...
quiero que llegue el mont ventoux, o por lo menos la contrareloj.
quiero que llegue el mont ventoux, o por lo menos la contrareloj.
si us plau
a través de este medio, se exhorta a los vecinos poseedores de la piscina que no se ve pero se escucha a que no se lancen tan ostensiblemente al agua con este calor que tiene transpirando irremediablemente al resto del vecindario.
gracias.
gracias.
sábado, 11 de julio de 2009
Con precisión quirúrgica, mejor dicho: contable.
Haciendo gala de su nombre, Alberto Contador calculó exactamente el momento en el que tenía que atacar, a dos quilómetros de coronar el puerto fuera de categoría de Arcalís, para dejar a Lance Armstrong dos segundos por detrás de él y recuperar el puesto de líder en un equipo, el Astana, al que parece muy difícil que alguien le haga daño.
La etapa más larga de toda la competencia, 224 quilómetros desde Barcelona hasta Andorra, tuvo uno de esos finales épicos inolvidables con la victoria del joven y debutante francés Brice Feillou (segundo triunfo francés después del de Voeckler) y ese último ataque inesperado de contador al que Armstrong no pudo o no quiso responder.
Eso fue ayer. Hoy, en una etapa muy movida en los pirineos, España obtuvo su primera victoria en un final no apto para cardíacos con un ciclista que me encanta, el murciano Luis León Sánchez del Caisse d’Epargne.
De cara a la etapa de mañana, final del bloque de los Pirineos con el mítico Tourmalet en medio, el AG2R del italiano Nocentini, actual líder de la general con sólo 6 segundos de renta sobre Contador, parece haber firmado un acuerdo de paz con el Astana que, por lo visto, no está demasiado interesado en hacers con Maillot Jaune todavía. Falta mucho, todo el mundo sabe que la tercera semana será de locos y Bruyneel entiende mejor que nadie que tener el Maillot implica muchísimo desgaste para cualquier equipo, incluso para este dream team del Astana que luce imbatible desde todo punto de vista.
Más allá de los detalles de casuística, sigue pareciendo claro que Contador vino a llevarse su segundo Tour, le pese a quien le pese. Ayer, en una etapa de mucho nerviosismo por ser la primera de alta montaña, donde todos se miraban y nadie se movía, él demostró que las piernas le responden. Psicológicamente obtuvo una gran victoria sobre todos los otros favoritos, incluyendo a su “compañero” Lance Armstrong, que, atención, estuvo ahí, aguantando todo el tiempo, para los que tenían dudas.
La etapa más larga de toda la competencia, 224 quilómetros desde Barcelona hasta Andorra, tuvo uno de esos finales épicos inolvidables con la victoria del joven y debutante francés Brice Feillou (segundo triunfo francés después del de Voeckler) y ese último ataque inesperado de contador al que Armstrong no pudo o no quiso responder.
Eso fue ayer. Hoy, en una etapa muy movida en los pirineos, España obtuvo su primera victoria en un final no apto para cardíacos con un ciclista que me encanta, el murciano Luis León Sánchez del Caisse d’Epargne.
De cara a la etapa de mañana, final del bloque de los Pirineos con el mítico Tourmalet en medio, el AG2R del italiano Nocentini, actual líder de la general con sólo 6 segundos de renta sobre Contador, parece haber firmado un acuerdo de paz con el Astana que, por lo visto, no está demasiado interesado en hacers con Maillot Jaune todavía. Falta mucho, todo el mundo sabe que la tercera semana será de locos y Bruyneel entiende mejor que nadie que tener el Maillot implica muchísimo desgaste para cualquier equipo, incluso para este dream team del Astana que luce imbatible desde todo punto de vista.
Más allá de los detalles de casuística, sigue pareciendo claro que Contador vino a llevarse su segundo Tour, le pese a quien le pese. Ayer, en una etapa de mucho nerviosismo por ser la primera de alta montaña, donde todos se miraban y nadie se movía, él demostró que las piernas le responden. Psicológicamente obtuvo una gran victoria sobre todos los otros favoritos, incluyendo a su “compañero” Lance Armstrong, que, atención, estuvo ahí, aguantando todo el tiempo, para los que tenían dudas.
viernes, 10 de julio de 2009
con el silencio con el que aparece el rayo en la madrugada
- ¿y?
- los vi: ayer en la llegada; hoy en la partida.
- ¿y?
- una fiesta; lástima la lluvia, la verdad.
- mucha gente, igual.
- mucha. lo que más me llamó la atención fue la velocidad con la que todo ocurre y el silencio que los precede. yo esperaba, obviamente, un estruendo divino, una luz cegadora, un disparo de nieve... y pasan, así, "como la vida misma" (dijera gran hermano), en un segundo. como siempre sucede en estos casos, los héroes son mucho más pequeños que en la imaginación (y en la televisión).
- y sí.
- otra cosa: los rostros. realmente están desfigurados, sucios, quebrados.
- como en los "triplettes de belleville"...
- exacto.
- me impresionó mucho la diferencia entre ayer y hoy. hoy estaban limpios, resplandecientes, alegres... como si en la tarde te entregaran algo que está roto y de mañana lo tuvieras como nuevo.
- ¡y la que les espera!
- sí, una de las etapas más duras del tour.
- ¡final en puerto fuera de categoría!
- no hay que perdérselo.
- habrá novedades.
- por supuesto. hoy va a haber cambio de malla amarilla. pero no creo que los dos candidatos del astana se saquen diferencia. me sorprendería muchísimo que contador atacara desde hoy a armstrong, sobre todo sabiendo que la penúltima etapa termina en el mont ventoux, y armstrong no tiene por qué atacar. los demás, creo que ya no interesan, es muy difícil que puedan hacerle daño al dream team del astana. pero no nos anticipemos.
- no.
- no quiero sonar como periodista deportivo pero: te dije que iba a ganar hushovd.
- qué novedad. ¿y hoy?
- uf, esa está difícil.
- ¿lance de amarillo mañana?
- es muy probable.
- los vi: ayer en la llegada; hoy en la partida.
- ¿y?
- una fiesta; lástima la lluvia, la verdad.
- mucha gente, igual.
- mucha. lo que más me llamó la atención fue la velocidad con la que todo ocurre y el silencio que los precede. yo esperaba, obviamente, un estruendo divino, una luz cegadora, un disparo de nieve... y pasan, así, "como la vida misma" (dijera gran hermano), en un segundo. como siempre sucede en estos casos, los héroes son mucho más pequeños que en la imaginación (y en la televisión).
- y sí.
- otra cosa: los rostros. realmente están desfigurados, sucios, quebrados.
- como en los "triplettes de belleville"...
- exacto.
- me impresionó mucho la diferencia entre ayer y hoy. hoy estaban limpios, resplandecientes, alegres... como si en la tarde te entregaran algo que está roto y de mañana lo tuvieras como nuevo.
- ¡y la que les espera!
- sí, una de las etapas más duras del tour.
- ¡final en puerto fuera de categoría!
- no hay que perdérselo.
- habrá novedades.
- por supuesto. hoy va a haber cambio de malla amarilla. pero no creo que los dos candidatos del astana se saquen diferencia. me sorprendería muchísimo que contador atacara desde hoy a armstrong, sobre todo sabiendo que la penúltima etapa termina en el mont ventoux, y armstrong no tiene por qué atacar. los demás, creo que ya no interesan, es muy difícil que puedan hacerle daño al dream team del astana. pero no nos anticipemos.
- no.
- no quiero sonar como periodista deportivo pero: te dije que iba a ganar hushovd.
- qué novedad. ¿y hoy?
- uf, esa está difícil.
- ¿lance de amarillo mañana?
- es muy probable.
jueves, 9 de julio de 2009
un sueño realizado
- antes que nada, ¿puedo mandar un saludito?
- sí, claro.
- perfecto, un saludo para basualdo que cumple años y siempre nos mira.
- bueno, ahora seguimos con la entrevista. ¿qué significa para vos que el tour de francia llegue a barcelona?
- para mí es un sueño realizado, pensando en el cuento de onetti también. de hecho no me lo puedo creer todavía, hasta que no esté ahí, en montjuic...
- ¿te molesta que el día esté gris y lluvioso?
- para nada, al contrario, no hace calor, no hay sol, va a ir menos gente, va a haber menos apretuje. espero.
- ¿de dónde te viene esa pasión por el ciclismo?
- yo me acuerdo que, de niño, un primo de mi madre me llevaba a ver pasar la vuelta ciclista del uruguay. él vivía en la esquina de lo de mi abuela y yo pasaba buena parte de las vacaciones de semana santa ahí. entonces, en general el domingo de pascuas, íbamos a ver la llegada de la vuelta, que pasaba por la vieja ruta 1, luis batlle berres. eran los tiempos de federico moreira, federico el grande. y me acuerdo que daniel, el primo de mi madre, llevaba una pequeña radio a transistores y me iba informando de la evolución de la carrera. para mí era un momento mágico, ver venir a los ciclistas, y daniel gritando: “¡vamos federico!!” en fin, todos alentábamos a federico. el ciclismo tiene una cosa heroica, épica, que no tiene ningún otro deporte, barthes lo ve bastante bien en sus "mitologías", para un niño es casi como ver a un superhéroe. imaginate: son tipos que se pasan todo el día arriba de una bicicleta y juegan a ver quién es el más rápido, es lo mejor que hay. Esa simplicidad del deporte, esa aparente simplicidad, es lo que hace que mucha gente, por lo menos en uruguay, lo menosprecie, hablan de los ciclistas como si fueran subnormales…
- (risas)
- en serio, yo lo escuché muchas veces, se burlan de ellos porque no logran ver lo heroico, no lograrían ver a aquiles ni aunque durmiera con ellos en la cama. y ojo que yo caí en esa actitud, dejé de ver ciclismo, creo que también porque el deporte tuvo un bajón mediático muy grande.
- ¿y cómo volviste a él?
- primero, aunque parezca tonto, con esa canción de cabrera “el viento en la cara”. Un poco con eso. después, cuando empecé a vivir solo, volví a ir a recibir a la vuelta, y si estaba de vacaciones iba a verla cuando pasaba cerca, vi muchas en la paloma. es un deporte muy pobre en uruguay, pero la magia es la misma, yo los veía pasar y se me erizaba la piel.
- ¡qué exagerado!
- de verdad. Después empecé a practicar, ya de viejo, el deporte yo mismo, cuando me preparaba para los triatlones. compré una trek, salía con un grupo de colegas… en fin, empecé a entender mucho mejor lo que pasaba. eran los tiempos en que lance armstrong ganaba siempre el tour y como estaba esa figura lo pasaban en directo en espn. ahí sí que me volví aficionado, grababa las etapas y las volvía a ver… un fanático del tourr y de lance.
- y soñabas con ir a verlo.
- claro, sabía que era imposible, pero me imaginaba en los pirineos, en los alpes, viéndolo pasar. como me imaginaba viendo un superbowl, una final de un mundial o una olimpíada. esas cosas… cuando empezó a surgir la posibilidad de venir para aquí, te juro que yo pensaba, un fin de semana, cueste lo que cueste, me voy hasta los pirineos a ver una etapa, o a los alpes. Cuando llegué acá pregunté cómo podía hacer para ir y me dijeron, “no te preocupes, este año pasa por acá”. y además de eso, la noticia de que volvía lance… ¿te das cuenta?
- a pedir de boca…
- mejor imposible.
- ¿y cuál es la jugada?
- cuando salga de trabajar me voy para ahí, espero llegar como a las tres y media a montjuic, para posicionarme bien, los ciclistas llegarán pasadas las cinco.
- ¿quién gana?
- ayer los escapados sorprendieron al pelotón y se dio esa victoria fantástica de voeckler, hoy no creo que el pelotón se deje sorprender. cavendish tiene todos los boletos para ganar, pero yo pienso que freire va a hacer un esfuerzo por estar en su país. se ha hablado mucho de la llegada en subida, hushovd parece ser más potente. no sé. va a estar entre esos tres, pero no es que esté inventando la pólvora... veremos.
- veremos.
- sí, claro.
- perfecto, un saludo para basualdo que cumple años y siempre nos mira.
- bueno, ahora seguimos con la entrevista. ¿qué significa para vos que el tour de francia llegue a barcelona?
- para mí es un sueño realizado, pensando en el cuento de onetti también. de hecho no me lo puedo creer todavía, hasta que no esté ahí, en montjuic...
- ¿te molesta que el día esté gris y lluvioso?
- para nada, al contrario, no hace calor, no hay sol, va a ir menos gente, va a haber menos apretuje. espero.
- ¿de dónde te viene esa pasión por el ciclismo?
- yo me acuerdo que, de niño, un primo de mi madre me llevaba a ver pasar la vuelta ciclista del uruguay. él vivía en la esquina de lo de mi abuela y yo pasaba buena parte de las vacaciones de semana santa ahí. entonces, en general el domingo de pascuas, íbamos a ver la llegada de la vuelta, que pasaba por la vieja ruta 1, luis batlle berres. eran los tiempos de federico moreira, federico el grande. y me acuerdo que daniel, el primo de mi madre, llevaba una pequeña radio a transistores y me iba informando de la evolución de la carrera. para mí era un momento mágico, ver venir a los ciclistas, y daniel gritando: “¡vamos federico!!” en fin, todos alentábamos a federico. el ciclismo tiene una cosa heroica, épica, que no tiene ningún otro deporte, barthes lo ve bastante bien en sus "mitologías", para un niño es casi como ver a un superhéroe. imaginate: son tipos que se pasan todo el día arriba de una bicicleta y juegan a ver quién es el más rápido, es lo mejor que hay. Esa simplicidad del deporte, esa aparente simplicidad, es lo que hace que mucha gente, por lo menos en uruguay, lo menosprecie, hablan de los ciclistas como si fueran subnormales…
- (risas)
- en serio, yo lo escuché muchas veces, se burlan de ellos porque no logran ver lo heroico, no lograrían ver a aquiles ni aunque durmiera con ellos en la cama. y ojo que yo caí en esa actitud, dejé de ver ciclismo, creo que también porque el deporte tuvo un bajón mediático muy grande.
- ¿y cómo volviste a él?
- primero, aunque parezca tonto, con esa canción de cabrera “el viento en la cara”. Un poco con eso. después, cuando empecé a vivir solo, volví a ir a recibir a la vuelta, y si estaba de vacaciones iba a verla cuando pasaba cerca, vi muchas en la paloma. es un deporte muy pobre en uruguay, pero la magia es la misma, yo los veía pasar y se me erizaba la piel.
- ¡qué exagerado!
- de verdad. Después empecé a practicar, ya de viejo, el deporte yo mismo, cuando me preparaba para los triatlones. compré una trek, salía con un grupo de colegas… en fin, empecé a entender mucho mejor lo que pasaba. eran los tiempos en que lance armstrong ganaba siempre el tour y como estaba esa figura lo pasaban en directo en espn. ahí sí que me volví aficionado, grababa las etapas y las volvía a ver… un fanático del tourr y de lance.
- y soñabas con ir a verlo.
- claro, sabía que era imposible, pero me imaginaba en los pirineos, en los alpes, viéndolo pasar. como me imaginaba viendo un superbowl, una final de un mundial o una olimpíada. esas cosas… cuando empezó a surgir la posibilidad de venir para aquí, te juro que yo pensaba, un fin de semana, cueste lo que cueste, me voy hasta los pirineos a ver una etapa, o a los alpes. Cuando llegué acá pregunté cómo podía hacer para ir y me dijeron, “no te preocupes, este año pasa por acá”. y además de eso, la noticia de que volvía lance… ¿te das cuenta?
- a pedir de boca…
- mejor imposible.
- ¿y cuál es la jugada?
- cuando salga de trabajar me voy para ahí, espero llegar como a las tres y media a montjuic, para posicionarme bien, los ciclistas llegarán pasadas las cinco.
- ¿quién gana?
- ayer los escapados sorprendieron al pelotón y se dio esa victoria fantástica de voeckler, hoy no creo que el pelotón se deje sorprender. cavendish tiene todos los boletos para ganar, pero yo pienso que freire va a hacer un esfuerzo por estar en su país. se ha hablado mucho de la llegada en subida, hushovd parece ser más potente. no sé. va a estar entre esos tres, pero no es que esté inventando la pólvora... veremos.
- veremos.
miércoles, 8 de julio de 2009
"entre escuchas, pérdida."
fragmento de una excelente entrevista de Laura Giordani, Arturo Borra y Víktor Gómez a Eduardo Milán.
"Creo que hay que comunicar —en la acepción de hacer contacto, no de intercambiar sentido— por lo no necesariamente comunicable. La comunicación es un «algo más» poético, pero no es el sentido del poema. Tampoco el enclaustramiento. Hoy es más importante dejar suspendido que cerrarse. El valor del erizo que le otorga Derrida a la poesía es correcto. Es el gran valor de la poesía su erizamiento y su capacidad de erizar, de erizar por erizamiento, no por horrorizar, no por poner los pelos de punta. Aquí no hay problemas de comunicación. Ese no es ya el tema. Lo incomunicable es difícil de manipular, es cierto. Pero más que incomunicados estamos desolados. Somos impotentes ante cómo marcha el mundo y ante el hecho de que no todos estamos así. Esto es un devenir ideológico-moral de la poesía que no todo el mundo suscribe porque la poesía no tiene que ver, en principio, con eso. Es lo que mueve a la ira de la actitud de los «neutrales» de la poesía: se vuelven principistas, esencialistas. Conjugan proletariado y monarquía por la magia de la rima. Se vuelven los verdaderos humanistas, Petrarcas. Sin embargo, la poesía no es cualquier historia ni todo el mundo es poeta. Lo primero es responder con lo específico, después marchamos. Lo nuestro es la palabra, las relaciones con las palabras. No somos los únicos. Pero le damos un sentido distinto a ese uso verbal. El problema es la exclusión de ciertas áreas de significación que otorgan sentido. Es lo que hace el poder mediático-consensual. Se diría que somos criminales porque no estamos de acuerdo con su manera de manejar el lenguaje. Su manera de manejar el lenguaje de la realidad y la realidad del lenguaje es totalmente elemental.
Un problema hoy es «¡otro problema más!», es un cansancio. No queremos más problemas. ¿Qué es lo que queremos? Hay que recomenzar la tarea de la poesía como una forma distinta de gratificación. Amenazar con lo difícil. Escamotear posibilidades fáciles. La gran frase de Bush en Irak: «Pueden no haber armas de destrucción masiva pero pueden surgir Oportunidades». Eso es bueno para los asesinos, los inversionistas y los Directores del Caos. No para la poesía. Hay que restringir las oportunidades. Pero no estoy hablando de ninguna agitación. Esto es lo que entiendo por compromiso: elección. El mundo actual siempre es corregible, si no es por aquí, es por aquí, si no es Dadá, es barroco. No: hay que elegir. Ir al tanteo está bien para empezar. Pero después hay que elegir un camino. Trabajar con lo inaccesible de la poesía. Hay un costado accesible en la poesía. Pero hay uno inaccesible. Si quieres jugar en la lógica olímpica pre-capitalista de ganar-perder, ahí ganas. Existe el enemigo. Va a negar que lo es. El enemigo debe saber que la poesía es una forma de tomar partido tan responsable como cambiar el mundo. No es una cuestión de mantenimiento. A este mundo lo mantienen ellos y lo sostenemos nosotros."
la nota entera aquí.
"Creo que hay que comunicar —en la acepción de hacer contacto, no de intercambiar sentido— por lo no necesariamente comunicable. La comunicación es un «algo más» poético, pero no es el sentido del poema. Tampoco el enclaustramiento. Hoy es más importante dejar suspendido que cerrarse. El valor del erizo que le otorga Derrida a la poesía es correcto. Es el gran valor de la poesía su erizamiento y su capacidad de erizar, de erizar por erizamiento, no por horrorizar, no por poner los pelos de punta. Aquí no hay problemas de comunicación. Ese no es ya el tema. Lo incomunicable es difícil de manipular, es cierto. Pero más que incomunicados estamos desolados. Somos impotentes ante cómo marcha el mundo y ante el hecho de que no todos estamos así. Esto es un devenir ideológico-moral de la poesía que no todo el mundo suscribe porque la poesía no tiene que ver, en principio, con eso. Es lo que mueve a la ira de la actitud de los «neutrales» de la poesía: se vuelven principistas, esencialistas. Conjugan proletariado y monarquía por la magia de la rima. Se vuelven los verdaderos humanistas, Petrarcas. Sin embargo, la poesía no es cualquier historia ni todo el mundo es poeta. Lo primero es responder con lo específico, después marchamos. Lo nuestro es la palabra, las relaciones con las palabras. No somos los únicos. Pero le damos un sentido distinto a ese uso verbal. El problema es la exclusión de ciertas áreas de significación que otorgan sentido. Es lo que hace el poder mediático-consensual. Se diría que somos criminales porque no estamos de acuerdo con su manera de manejar el lenguaje. Su manera de manejar el lenguaje de la realidad y la realidad del lenguaje es totalmente elemental.
Un problema hoy es «¡otro problema más!», es un cansancio. No queremos más problemas. ¿Qué es lo que queremos? Hay que recomenzar la tarea de la poesía como una forma distinta de gratificación. Amenazar con lo difícil. Escamotear posibilidades fáciles. La gran frase de Bush en Irak: «Pueden no haber armas de destrucción masiva pero pueden surgir Oportunidades». Eso es bueno para los asesinos, los inversionistas y los Directores del Caos. No para la poesía. Hay que restringir las oportunidades. Pero no estoy hablando de ninguna agitación. Esto es lo que entiendo por compromiso: elección. El mundo actual siempre es corregible, si no es por aquí, es por aquí, si no es Dadá, es barroco. No: hay que elegir. Ir al tanteo está bien para empezar. Pero después hay que elegir un camino. Trabajar con lo inaccesible de la poesía. Hay un costado accesible en la poesía. Pero hay uno inaccesible. Si quieres jugar en la lógica olímpica pre-capitalista de ganar-perder, ahí ganas. Existe el enemigo. Va a negar que lo es. El enemigo debe saber que la poesía es una forma de tomar partido tan responsable como cambiar el mundo. No es una cuestión de mantenimiento. A este mundo lo mantienen ellos y lo sostenemos nosotros."
la nota entera aquí.
martes, 7 de julio de 2009
lunes, 6 de julio de 2009
el diablo sabe por diablo, pero más sabe por viejo.
Las dos partes de este adagio le caben al veterano ciclista de Texas Lance Armstrong. Parecía una etapa tranquila hoy en el sur de Francia hasta que el diablo metió la cola. Mucho se había hablado de cómo el viento cruzado podía producir cortes en el pelotón. Sin embargo, la jornada se venía desarrollando con el aburrimiento clásico de las etapas de transición. Unos cuantos escapados cosechando los puntos del camino, hasta que un equipo de algún sprinter se pone a trabajar para alcanzarlos, en este caso el Columbia (de Cavendish). Lo mismo que pasó ayer y lo que pasa cada año. Pero entre bostezo y bostezo, cuando faltaban poco más de 30 kilómetros y los escapados estaban a menos de un minuto, curva a la izquierda y corte en el pelotón.
Los del Columbia tirando como si los llevara el diablo, o mejor dicho, los del Columbia llevando al diablo en la escapada. Es curioso cómo ninguno de los favoritos estuvo atento a estos movimientos tan largamente anunciados. Sólo Lance y dos compañeros del Astana (Popovych y Zubeldia) se prendieron en el grupo de punta. Mientras los periodistas españoles exigían que Armstrong se fuera para atrás y nadie colaborara en la fuga, no ocurrió ni lo uno ni lo otro: los del Astana también entraron en la escalera y abrieron una diferencia de 40 segundos que sirvió para que el estadounidense se colocara tercero en la general, a 19 segundos de Contador.
¿Qué quiere decir esto? que todos los pronósticos se fueron al demonio. Que si mañana, como se espera, el Astana gana la contrarreloj por equipos, será Armstrong y no Contador quien se vista de amarillo. Que todo el discurso de que no había otro jefe que Contador y todos lo iban a apoyar era, obviamente, falso. Que no me gustaría ser hoy Bruyneel, el técnico del equipo Astana. Que me gustaría ver las miradas que se cruzaron hoy el tejano y el madrileño. Que el Tour es enorme y Armstrong parece tener a Zeus y a Atenea de su parte.
Ah, por cierto, ganó Cavendish, otra vez: dos en dos. Si termina el Tour, cosa que no ha hecho en ninguna de sus anteriores participaciones, es difícil que alguien le arrebate la malla verde.
roger federer como experiencia religiosa
estoy leyendo, lentamente y con calma, la monumental novela de david foster wallace "infinite jest" (unas 1.300 páginas) que ocurre, en buena parte, dentro de una academia de tenis para adolescentes. la visión heróica que foster wallace transmite del deporte individual, visión que comparto, se enciende cuando ocurren cosas como lo que hizo ayer ese semidios llamado federer.
me vienen muchas ganas de traducir el famoso artículo del escritor neoyorkino sobre los "federer moments" (new york times, agosto 2006): "roger federer as a religious experience."
por ahora, este es el link en inglés, vale la pena.
domingo, 5 de julio de 2009
barcelona capital aunque no quiera.
en medio de un temporal de protestas antitaurinas, barcelona se ha convertido hoy en la capital mundial de la fiesta brava. 19.000 entradas que se agotaron en abril, a una hora de ponerse a la venta y hoy costaban más de 3.000 euros. y todo por josé tomás que lidiará seis toros en la monumental.
una lástima no poder estar ahí.
por suerte, el jueves, cuando barcelona se convierta en capital mundial del ciclismo, será una fiesta gratuita.
sábado, 4 de julio de 2009
contador dice: "sí, acepto"
se terminaron las especulaciones: menos de veinte minutos, exactamente 19':50", bastaron a alberto contador para consolidarse como el principal candidato a ganar el tour de france. la victoria de la primera etapa, contrarreloj individual en mónaco, fue para el especialista, por el que todos apostaban, el suizo fabien cancellara (18 segundos menos que contador). pero el español se sacó un gran peso de encima al ganarle a todos sus rivales directos en la general y quedar segundo en la etapa, batiendo, incluso, a muchísimos especialistas en este terreno como wiggins, tony martin o levi leipheimer. y lo más importante, sin dudas: los 22 segundos que le sacó a su compañero de equipo lance armstrong (que, atención, no hizo una mala crono, terminando décimo).
"alberto ha hecho una muy buena contrarreloj siendo el mejor de todos los favoritos. Es importante para empezar la carrera" dijo el director técnico del equipo, bruyneel. y es que, contador, le sacó más de un minuto a menchov (que hizo una pésima etapa), cincuenta segundos a su compatriota carlos sastre y cinco a cadel evans. pero bruyneel agregó: "Para nosotros tener cuatro corredores entre los diez primeros es muy bueno." sin embargo, justamente ese puede ser el problema del astana, los conflictos internos. contador, kloden, leipheimer y armstrong, en ese orden, quedaron muy cerca entre los diez primeros y todos tienen chance en la general.
¿por qué era tan importante ser el primero del astana? porque seguramente el martes, en la crono por equipos de Montpellier, será el primero del astana quien se vista de amarillo. y será muy difícil, si no pasa nada extraño, que alguien le quite el maillot jaune a Contador después de eso. ayer demostró que lo tiene todo: el espíritu, la serenidad, las piernas y el mejor equipo. en la ruta, hasta el viernes, etapas de transición, los sprinters buscarán sumar puntos en las llegadas masivas. cavendish, freire, boonen, hoshovd, son los apellidos que más que escucharemos esta semana.
mañana es el día
Cualquier periodista, cualquier aficionado, cualquier ciclista está diciendo lo mismo: "sí, contador es el favorito, pero..." Incluso Bruyneel, director técnico del equipo Astana (que tiene a Contador y a Armstrong) lo dijo en conferencia de prensa: "en este momento Contador es el líder del equipo pero...". Hasta el mísmisimo Armstrong se sacó el peso de encima: "el favorito es Contador". Esa diferencia quedó clara en la distribución de los números: Contador obtuvo el 21, primero de su equipo.
Pero claro, todos esperan por la primera etapa, la de mañana: una contrarreloj individual (sólo 15,5 km; la mitad en subida y la mitad en bajada) en la que, es seguro, el tejano intentará sacar diferencias sobre el español para ganarse el lugar de líder de equipo, por lo menos hasta que lleguen las primeras etapas de alta montaña, que en este tour, serán los pirineos en la primera semana, concretamente la etapa del viernes 10 entre Barcelona y Andorra.
Eso sí, mientras todos discuten en el Astana, mientras su fundador Vinokúrov arma revuelo con su retorno, hay otro ciclista que, calladamente, se siente igual de favorito que Contador y con derecho propio: es el que saldrá con el dorsal número uno y el maillot jaune, el ganador del año pasado, otro español, Carlos Sastre.
Independientemente de eso, parece la misma obviedad para todo el mundo: Contador tiene que ganar este tour. Eso sí, cuidado, como siempre, hay mucha gente que lo estará vigilando bien de cerca, incluyendo a su compañero de equipo Lance, a Menchov, a Sastre, o al que va en el lugar de Valverde en el Caisse d'Epargne, el gallego, ya ganador del tour y del que nadie habla, Oscar Pereyro, o tal vez el mismo Luis León Sánchez, también del Caisse d'Epargne (ganador de la París-Niza).
Lo único seguro, seguro, seguro (por el momento), es que "un servidor" estará esperando aquí, en Barcelona, la llegada de la gran caravana el jueves 9, con la alegría incomparable de ver, por primera vez, pasar a todos estos héroes juntos.
Pero claro, todos esperan por la primera etapa, la de mañana: una contrarreloj individual (sólo 15,5 km; la mitad en subida y la mitad en bajada) en la que, es seguro, el tejano intentará sacar diferencias sobre el español para ganarse el lugar de líder de equipo, por lo menos hasta que lleguen las primeras etapas de alta montaña, que en este tour, serán los pirineos en la primera semana, concretamente la etapa del viernes 10 entre Barcelona y Andorra.
Eso sí, mientras todos discuten en el Astana, mientras su fundador Vinokúrov arma revuelo con su retorno, hay otro ciclista que, calladamente, se siente igual de favorito que Contador y con derecho propio: es el que saldrá con el dorsal número uno y el maillot jaune, el ganador del año pasado, otro español, Carlos Sastre.
Independientemente de eso, parece la misma obviedad para todo el mundo: Contador tiene que ganar este tour. Eso sí, cuidado, como siempre, hay mucha gente que lo estará vigilando bien de cerca, incluyendo a su compañero de equipo Lance, a Menchov, a Sastre, o al que va en el lugar de Valverde en el Caisse d'Epargne, el gallego, ya ganador del tour y del que nadie habla, Oscar Pereyro, o tal vez el mismo Luis León Sánchez, también del Caisse d'Epargne (ganador de la París-Niza).
Lo único seguro, seguro, seguro (por el momento), es que "un servidor" estará esperando aquí, en Barcelona, la llegada de la gran caravana el jueves 9, con la alegría incomparable de ver, por primera vez, pasar a todos estos héroes juntos.
jueves, 2 de julio de 2009
último adiós a la parkita y espectrito jr
en ejidos de santa martha acatitla se despiden los restos de los hermanos jiménez. la parkita y espectrito jr. ya luchan con los ángeles.
Etiquetas:
curiosidades,
México,
Obituario,
Realidad
miércoles, 1 de julio de 2009
(sic)
"Encuentran muertos a la Parkita y Espectro Jr.
Una gran sorpresa fue para los seguidores de la Lucha Libre Mexicana enterarse el día de hoy de la muerte de dos reconocidos mini luchadores.
Y es que los cuerpos de La Parkita y Espectro Jr. fueron encontrados en un hotel de la Ciudad de México esta madrugada. Al parecer, las investigaciones apuntan hasta el momento a un asesinato.
Se cree que acudieron a este hotel en compañía de mujeres dedicadas al sexoservicio, quienes los drogaron para robarles sus pertenencias, pero se cree que la cantidad de la sustancia que utilizaron fue más de la debida, provocando la muerte de estos ídolos de niños.
Así que en espera de más información, estaremos dándoles los detalles de este terrible acontecimiento."
enanos enmascarados, droga en exceso, prostitutas...
¿alguien sabe dónde estaba berlusconi a esa hora?
otros recuerdos
vale la pena pasar por el homenaje que le hace hoy el pais de Madrid (sobre todo por los audios) y también por aquí.
un recuerdo
cinco días después de que Onetti cumpliera 53 años, murió su maestro y él escribió uno de sus más celebrados y citados artículos. y a mí se me da por poner hoy, aquí, el "réquiem por faulkner".
"Nunca jugó en el glorioso Wanderers aunque estamos seguros de que habría amado ese nombre. Tal vez culpa de los dirigentes, acaso de los seleccionadores. Nunca se preocupó del problema de Laos ni, siquiera, de las próximas elecciones uruguayas. No nos dejó opinión sobre la generación del 45. No hizo testamento acerca de la influencia decisiva de la 45 respecto del futuro de la literatura mundial. El autor de estas líneas se lava cortésmente las manos afirmando que está fuera del asunto, que pertenece a la generación del 44 y desde allí mira, se divierte y, es inevitable, padece.
Se llama, el obituado, William Faulkner. No se volcaron los ómnibus en las calles, el Superior Gobierno no decretó ni un par de días de duelo, las campanas no repicaron con mansedumbre y tristeza. Ni siquiera nos acordamos del plan de buena voluntad.
El difunto sigue llamándose William Faulkner y ése será su nombre hasta que explote la primera bomba nuclear. Nadie, nada después, como es fácil de comprender.
En este momento exacto estará endurecido, vestido de frac, adornado con medallas que alguna pobre gente, que nada podía saber de él, que morirá ignorando el sentido de su olor, le impuso en el pecho y en la solapa izquierda.
Pero esta humillación –incluyendo la definitiva humillación de morirse, también él– pierde importancia cuando pensamos en lo que vendrá.
En el torrente –ordenado y sabio en apariencia– firmado por críticos de prestigio mundial que derramarán lágrimas o correcciones encima del pobre tipo que murió a los 64 años en un granero del Sur de U.S.A., burlándose de una página virgen, con un vaso de whisky bourbon junto al codo.
Nuestros diarios están, felizmente, dirigidos por intelectuales de talento indiscutible y probado. ¿Les costaría mucho manejar una regla centimetrada y establecer cuánto espacio dedicaron a la muerte, al estudio de un genio, y cuánto al match de Peñarol y Nacional?
Si algún rector de la opinión pública se encuentra atareado o perezoso, bastará con que nos haga una seña. Tendrá de inmediato, las cifras correspondientes a 6 de julio, hoy, noche en que escribimos.
Pero, sucede, hace algunos años tradujimos para nuestros amigos de Acción varios fragmentos de un reportaje hecho a William Faulkner por El Europeo. Acción lo reproduce hoy, 6 de julio, calificándolo erróneamente de "póstumo”. En aquel tiempo nos limitamos a dar, en un modesto español, lo que menos podía molestar, herir.
Pero en este 6 de julio de 1962 se nos ocurre que nuestro amor por ese finado flaco y tieso merece decir nuestra pobre verdad frente al reportaje completo de El Europeo que reproduce Acción.
Comencemos por afirmar nuestra total solidaridad con las citas elegidas. (Por nosotros, claro). Pero, con muchos años vividos en el periodismo y de él, nos vemos obligados a confesar de inmediato que el difunto de turno, William Faulkner, no actuó en Maracaná ni tuvo nada que ver con ninguna de nuestras generaciones literarias. Por algo impersonal lo reiteramos. La lealtad con el lector es el primer deber del escriba.
¡Ah! El muerto ya hediendo, nunca dijo que sí ni que no. Era, literariamente, uno de los más grandes artistas del siglo. Alguien que no domina el inglés y, mucho menos, el español profetiza que antes de medio siglo todo el mundo culto, bien educado, bien alimentado, estará de acuerdo con una simple perogrullada: la riqueza, el dominio del inglés de William Faulkner equivalen a lo que buscó y obtuvo William Shakespeare. Oiremos de buena voluntad a G. B. Shaw, si se le ocurre terciar en el asunto.
Pero ya hablamos de periodismo y de lectores, ya que estamos perdidos y en algún plano, ustedes también.
Hace algunos años Malcolm Cowley, uno de los críticos literarios más inteligentes y amenos de U.S.A., reporteó a otro difunto que merecía –y lograba– mayor difusión e interés que el muerto del 6 de julio. Se llamaba Hemingway, había cazado elefantes, osos y leones, se había casado varias veces, inventó el Martini Montgomery –15 contra uno– y también una extraordinaria novela: "Adiós a las armas”.
Cowley preparó el terreno y dijo finalmente –"¿Cuál es el novelista norteamericano más importante de nuestra época?”Hemingway rió unos segundos y mezcló el contenido de las cantimploras que cargaba en el cinturón.
–No puede discutirse, no puede preguntarse. Lejos, muy adelante de todos nosotros, está Faulkner. Yo dejaría gustoso de escribir si me dieran, en cambio, la tarea de administrarlo, de decirle basta y ser obedecido. Porque Faulkner no es perfecto, precisamente por eso. Por continuar trabajando cuando está cansado y borracho, cuando el mundo ha desaparecido y ya no puede saberse si la noche se mantiene protectora – para él– o la mañana llegó para todos los hombres, para el trabajo inquerido, para las preocupaciones no buscadas. Pero si yo pudiera dirigirlo...
Hemingway no tenía aún el premio Nobel. Estamos escribiendo de memoria, sin originales para copiar o traducir. Tal vez por eso, y sin querer, estamos mejorando su estilo.
Las anécdotas son muchas, tontas –en su mayor parte–, como corresponde esperar de un hombre tímido, iluminado alternativamente por la gloria al estilo yanqui y olvidado en la sombra, la soledad auténtica y dichosa. Muchas de ellas deben haber sido reproducidas en estos días. Conviene recordar que cuando le dieron el Nobel en el 50 sus libros estaban ya agotados en U.S.A. desde siete años antes. No había editores ni público que permitieran arriesgarse a nuevas ediciones.
Aunque recientemente reproducido entre nosotros, el casi póstumo reportaje de El Europeo permite algunas prolongaciones de este réquiem.
En primer lugar, define a lo que entendemos como un artista: un hombre capaz de soportar que la gente –y para la definición– cuanto más próxima mejor, se vaya al infierno, siempre que el olor a carne quemada no le impida continuar realizando su obra. Y un hombre que, en el fondo, en la última profundidad, no dé importancia a su obra.
Porque sabe, no puede olvidar –y ésta es su condena y su diferencia– que todo terminará como en este 6 de julio que comentamos; o en cualquier otra fecha que alguien se moleste en elegir por nosotros. Gracias."
el subrayado es mío.
"Nunca jugó en el glorioso Wanderers aunque estamos seguros de que habría amado ese nombre. Tal vez culpa de los dirigentes, acaso de los seleccionadores. Nunca se preocupó del problema de Laos ni, siquiera, de las próximas elecciones uruguayas. No nos dejó opinión sobre la generación del 45. No hizo testamento acerca de la influencia decisiva de la 45 respecto del futuro de la literatura mundial. El autor de estas líneas se lava cortésmente las manos afirmando que está fuera del asunto, que pertenece a la generación del 44 y desde allí mira, se divierte y, es inevitable, padece.
Se llama, el obituado, William Faulkner. No se volcaron los ómnibus en las calles, el Superior Gobierno no decretó ni un par de días de duelo, las campanas no repicaron con mansedumbre y tristeza. Ni siquiera nos acordamos del plan de buena voluntad.
El difunto sigue llamándose William Faulkner y ése será su nombre hasta que explote la primera bomba nuclear. Nadie, nada después, como es fácil de comprender.
En este momento exacto estará endurecido, vestido de frac, adornado con medallas que alguna pobre gente, que nada podía saber de él, que morirá ignorando el sentido de su olor, le impuso en el pecho y en la solapa izquierda.
Pero esta humillación –incluyendo la definitiva humillación de morirse, también él– pierde importancia cuando pensamos en lo que vendrá.
En el torrente –ordenado y sabio en apariencia– firmado por críticos de prestigio mundial que derramarán lágrimas o correcciones encima del pobre tipo que murió a los 64 años en un granero del Sur de U.S.A., burlándose de una página virgen, con un vaso de whisky bourbon junto al codo.
Nuestros diarios están, felizmente, dirigidos por intelectuales de talento indiscutible y probado. ¿Les costaría mucho manejar una regla centimetrada y establecer cuánto espacio dedicaron a la muerte, al estudio de un genio, y cuánto al match de Peñarol y Nacional?
Si algún rector de la opinión pública se encuentra atareado o perezoso, bastará con que nos haga una seña. Tendrá de inmediato, las cifras correspondientes a 6 de julio, hoy, noche en que escribimos.
Pero, sucede, hace algunos años tradujimos para nuestros amigos de Acción varios fragmentos de un reportaje hecho a William Faulkner por El Europeo. Acción lo reproduce hoy, 6 de julio, calificándolo erróneamente de "póstumo”. En aquel tiempo nos limitamos a dar, en un modesto español, lo que menos podía molestar, herir.
Pero en este 6 de julio de 1962 se nos ocurre que nuestro amor por ese finado flaco y tieso merece decir nuestra pobre verdad frente al reportaje completo de El Europeo que reproduce Acción.
Comencemos por afirmar nuestra total solidaridad con las citas elegidas. (Por nosotros, claro). Pero, con muchos años vividos en el periodismo y de él, nos vemos obligados a confesar de inmediato que el difunto de turno, William Faulkner, no actuó en Maracaná ni tuvo nada que ver con ninguna de nuestras generaciones literarias. Por algo impersonal lo reiteramos. La lealtad con el lector es el primer deber del escriba.
¡Ah! El muerto ya hediendo, nunca dijo que sí ni que no. Era, literariamente, uno de los más grandes artistas del siglo. Alguien que no domina el inglés y, mucho menos, el español profetiza que antes de medio siglo todo el mundo culto, bien educado, bien alimentado, estará de acuerdo con una simple perogrullada: la riqueza, el dominio del inglés de William Faulkner equivalen a lo que buscó y obtuvo William Shakespeare. Oiremos de buena voluntad a G. B. Shaw, si se le ocurre terciar en el asunto.
Pero ya hablamos de periodismo y de lectores, ya que estamos perdidos y en algún plano, ustedes también.
Hace algunos años Malcolm Cowley, uno de los críticos literarios más inteligentes y amenos de U.S.A., reporteó a otro difunto que merecía –y lograba– mayor difusión e interés que el muerto del 6 de julio. Se llamaba Hemingway, había cazado elefantes, osos y leones, se había casado varias veces, inventó el Martini Montgomery –15 contra uno– y también una extraordinaria novela: "Adiós a las armas”.
Cowley preparó el terreno y dijo finalmente –"¿Cuál es el novelista norteamericano más importante de nuestra época?”Hemingway rió unos segundos y mezcló el contenido de las cantimploras que cargaba en el cinturón.
–No puede discutirse, no puede preguntarse. Lejos, muy adelante de todos nosotros, está Faulkner. Yo dejaría gustoso de escribir si me dieran, en cambio, la tarea de administrarlo, de decirle basta y ser obedecido. Porque Faulkner no es perfecto, precisamente por eso. Por continuar trabajando cuando está cansado y borracho, cuando el mundo ha desaparecido y ya no puede saberse si la noche se mantiene protectora – para él– o la mañana llegó para todos los hombres, para el trabajo inquerido, para las preocupaciones no buscadas. Pero si yo pudiera dirigirlo...
Hemingway no tenía aún el premio Nobel. Estamos escribiendo de memoria, sin originales para copiar o traducir. Tal vez por eso, y sin querer, estamos mejorando su estilo.
Las anécdotas son muchas, tontas –en su mayor parte–, como corresponde esperar de un hombre tímido, iluminado alternativamente por la gloria al estilo yanqui y olvidado en la sombra, la soledad auténtica y dichosa. Muchas de ellas deben haber sido reproducidas en estos días. Conviene recordar que cuando le dieron el Nobel en el 50 sus libros estaban ya agotados en U.S.A. desde siete años antes. No había editores ni público que permitieran arriesgarse a nuevas ediciones.
Aunque recientemente reproducido entre nosotros, el casi póstumo reportaje de El Europeo permite algunas prolongaciones de este réquiem.
En primer lugar, define a lo que entendemos como un artista: un hombre capaz de soportar que la gente –y para la definición– cuanto más próxima mejor, se vaya al infierno, siempre que el olor a carne quemada no le impida continuar realizando su obra. Y un hombre que, en el fondo, en la última profundidad, no dé importancia a su obra.
Porque sabe, no puede olvidar –y ésta es su condena y su diferencia– que todo terminará como en este 6 de julio que comentamos; o en cualquier otra fecha que alguien se moleste en elegir por nosotros. Gracias."
el subrayado es mío.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)