martes, 19 de mayo de 2009

obituario


ayer, el informativo matinal de televisión española comenzaba y terminaba por mario benedetti, el país de madrid lo tiene hoy en primera plana y así, uno a uno, todos los medios se han hecho eco de la muerte del poeta. aquí habló serrat, habló garcía montero, allá habló viglietti, los ministros y hasta el presidente. en uruguay hablaron todos. a sus ochenta y ocho años, era probablemente el poeta vivo más leído en idioma español. de hecho, para toda una generación, para más de una generación, mario benedetti representa, ES, la poesía. quiero decir: cuando piensan en poesía piensan en benedetti y, por lo tanto, hay una gran cantidad de poesía que se escribe en idioma español, sobre todo en américa latina, que NO ES poesía para ellos. estoy hablando de la gente, no de los poetas.

cuando yo estudiaba literatura, benedetti representaba todo lo que odiábamos. su nombre era vilipendiado en los pasillos de la facultad de humanidades y cuando alguien escribía algo cursi, corría el riesgo de que le dijeran que se parecía a benedetti. era el padre, más bien el abuelo, al que había que matar. en la mayoría de los casos, apenas si habían leído dos o tres poemas sueltos de éste o cualquier autor. después yo escribí un poema que empezaba así: "estamos en contra de mario benedetti...". a alguna gente le gustaba, sobre todo un verso que decía: "eligiendo a parra antes que a neruda". el poema hablaba de mi generación, "nacidos a la hora de la siesta" ponía, aludiendo a la dictadura.

antes de eso, cuando yo era niño o estaba entrando en la adolescencia, mis padres tenían una cassette de serrat cantando a benedetti que yo me sabía de memoria. en la portada ponía: "El sur también existe". yo lo escuchaba mucho, me gustaba. por esos tiempos, además, era un joven comunista y eso lo hacía mejor: la lucha del sur contra el norte, combate en el que nosotros éramos los buenos, los oprimidos, los que hacíamos todo bien y ellos eran los malos que nos hostigaban. aquella metáfora de la solidaridad entre los árboles me parecía magnífica. y sobre todo esa "mujer desnuda y en lo oscuro", algo que, por cierto, yo nunca había visto. cuando íbamos a la paloma en el auto lo escuchábamos más de una vez en un mismo viaje y lo cantábamos los cuatro integrantes de la familia. en cierta forma, a mí me parecía extrañísimo que un ídolo popular internacional como serrat se fijara en aquel poeta que había nacido en paso de los toros. ahora sé que ese poeta que ES la poesía para mucha gente de habla hispana.

un poco después de eso, el diario la república sacó sus obras completas o algo así. en todo caso eran muchos libritos, de un color verde claro y con la imagen de mario sobre fondo anaranjado, si mal no recuerdo. cada domingo un librito. mi padre los traía y yo me los fui leyendo poco a poco. había cosas que me parecían espantosas y había cosas buenas. pero sobre todo tuve la posibilidad de hablar de benedetti con conocimiento de causa. me gustaron los cuentos de geografías y los de montevideanos. me gustó la tregua. me gustó bastante. sigo pensando que es una gran novela de los cincuentas en el río de la plata. me gustaron los poemas de la oficina. benedetti me pareció mejor narrador que poeta. me sigue pareciendo. sin embargo, para todo el mundo ES la poesía.

entre medio de eso y hoy que ya está muerto, yo releía esporádicamente la poesía de benedetti cuando me cruzaba con alguno de sus inventarios. leía lo viejo, lo nuevo me parecía, me parece, intragable. lo leía buscando una clave, tratando de entender qué era lo que les gustaba y qué era lo que no nos gustaba nada. lo hacía con honestidad. sobre todo pensaba en por qué me encanta la poesía de ernesto cardenal o la de nicanor parra, que también utilizan un lenguaje "coloquial", y no la de benedetti. me lo pregunté muchas veces y llegué a una conclusión bastante subjetivia: cardenal era bueno y benedetti era malo. cardenal tiene algo que se denomina "talento" y nadie sabe qué es. parra está fuera de concurso.

el año pasado me editaron un libro de poemas que se llama “montevideanas”. es un libro escrito como una broma, para divertirme. en la tapa tiene la foto de benedetti con pelo de mujer. un chiste sobre el poeta que ES la poesía.

el 17 de mayo, vísperas de la batalla de las piedras, quedará por siempre como el aniversario de la muerte del poeta que descansa en el panteón (algo de lo que tanto hablaba el gran poeta uruguayo jorge medina vidal, cuya muerte, no muy lejana, pasó desapercibida). un recordatorio de eso. se suponía que este año iba a ser el de onetti. el centenario del nacimiento del mejor escritor que ha nacido en uruguay. sin embargo este señor, el del bigotito, se empeña en hacerle sombra; con un mismo origen, con un apellido similar, con un mismo país de exilio, con más fama. pero qué más da, ellos eran amigos y a juan carlos no le importan esas cosas.

por mi parte, cada vez que me cruce con un nuevo inventario (de seguro los habrá), seguiré releyendo lo viejo, tratando de entender qué ES la poesía.

1 comentario:

Anónimo dijo...

LA VERDAD ESTOY MUY TRISTE PORQUE PERDIMOS UNA GRAN PERSONA .GRACIAS A DIOS SUS LIBROS NUNCA MORIRAN